Hola,
Mi nombre es Gabriela Paola Ocampo Herrera y quiero compartir con ustedes mi experiencia en la clase de Liderazgo Gerencial y cómo los conceptos aprendidos, técnicas, herramientas y medios proporcionados durante la misma han almacenado en mi ser un aprendizaje incomparable, que sin duda han marcado un antes y un después en mi recorrido académico, profesional y personal.
En la actualidad las organizaciones consideran que para lograr las metas y objetivos estratégicos es importante proporcionar los recursos físicos y materiales bastos, crear estrategias de publicidad innovadoras, gestionar de manera correcta la inversión, incrementar ventas, reducir costos, entre otras características y elementos que tienen mayor relevancia en la administración efectiva de una empresa; sin embargo poco o nada focalizan su atención en las personas que hacen posible que las cosas sucedan, así como acertadamente lo menciona el basquetbolista profesional Michael Jordan "Algunas personas quieren que algo ocurra, otras sueñan con que pasará, y otras hacen que suceda". En este sentido, es de relevancia mencionar que las empresas exitosas están encabezadas por un personal gerencial que reconoce el compromiso y esfuerzo de personas distribuidas en los diferentes niveles jerárquicos de la organización, personas que comúnmente son llamados gerentes, jefes, supervisores, coordinadores, etc. pero que cuya definición científica es “Líder”, y es que un líder no es medido por seguidores ni mucho menos por la cantidad de personas bajo su cargo, un líder se mide por el impacto que genera en otras personas.
Partiendo de lo anterior puedo enunciar algunas características particulares que un líder debe desarrollar en sí mismo y en su equipo de trabajo, y es que un líder debe transformar, innovar y motivar al equipo para luego crecer, es una persona exigente, disciplinada, responsable, posee muy buena inteligencia emocional, busca la solución a los problemas, brinda autonomía y empoderamiento a su equipo de trabajo, permitiéndoles cometer errores sin tener miedo al fracaso.
Lo mencionado en el párrafo anterior tiene un trasfondo impresionante que ha generado en mí una huella igual de grande, pues fue precisamente en el mes de marzo del año 2020, en la clase de Liderazgo Gerencial brindada por el MBA Jorge Manuel Zelaya Fajardo que pude atesorar un aprendizaje significativo, de alto impacto y de fácil aplicación, el cual resumo en tres enunciados:
· PLORDICOCO: palabra cuyo significado de sus siglas equivale a: Planificación, Organización, Dirección, Coordinación y Control. La importancia de este término no solo radica en que durante toda la etapa académica y para los que hemos tenido la oportunidad de laborar se nos han enseñado como etapas de la administración y que su gestión debe girar entorno a las mismas. Su relevancia en el tema del liderazgo es que un líder tiene la función de aplicar y desarrollar el PLORDICOCO en su equipo de trabajo. Bajo este sentido, menciono que la lectura de los 4 pasos para las 10000 horas cuya autoría es del MBA Jorge Manuel Zelaya Fajardo va de la mano con el término descrito en estas líneas, y es que indiscutiblemente el hecho de realizar una actividad durante determinado tiempo no garantiza que seremos expertos o sobresalientes en ese oficio, pues a la larga ese se vuelve costumbre o rutina y no constancia. Para poder obtener el resultado deseado en primer lugar se debe tener claridad en el objetivo o meta, partiendo de ello es preciso centrar nuestra atención, y fuerza física y mental en realizar esa tarea sin perder el enfoque, de igual manera es necesario darle un seguimiento constante y periódico a lo que estamos realizando para poder evaluar el avance y los resultados que se van obteniendo a corto plazo, los cuales me permitirán ajustar los esfuerzos plasmados. Finalmente dar la milla extra, el ir más alto y más lejos, excediendo las expectativas nos garantiza la obtención de mejores resultados, logro de metas y nos convierte en mejores personas y profesionales.
· Amor y Rigor: ambas palabras más allá de considerarse antónimas, el equilibro entre ambas hace una armonía perfecta que se convierte en una competencia del líder. El amor está orientado en la empatía, afecto, afinidad e interés, por su parte el rigor se relacionada con la disciplina, exigencia, firmeza y precisión. En este sentido un líder debe desarrollar esta competencia blanda para gerenciar y guiar de una manera acertada a su equipo de trabajo, debe tener la capacidad de identificar y reconocer el momento para poder actuar o corregir de la manera más adecuada, siempre mostrando un acercamiento genuino, respeto, empatía hacia su equipo y sobre todo procurando no salirse del gran marco (límites).
· Entrenamiento de los 3 tipos de cerebro: tal como lo indica el título de este enunciado, el cerebro triúnico del neurocientífico Paul MacLean ha sido popular durante años debido a que según esta teoría se puede agrupar varias regiones del encéfalo en diferentes estructuras que realizan tareas diferentes (límbico, reptiliano y neo corteza). El cerebro límbico, tiende a manifestar las emociones, sentimientos y estados de ánimo; el cerebro reptiliano la realización de actividades rutinarias y predecibles en donde el cerebro funciona de manera automática a las mismas. Por su parte la neo corteza juega su papel cuando se desarrollan actividades que implican análisis y concentración. Si nos detenemos a pensar, cada uno de los seres humanos tiene más desarrollado uno más que los demás, sin embargo, la combinación de los tres es la receta mágica que le permitirá al líder manejar las situaciones, solucionar problemas y coordinar las actividades de una manera acertada.
Finalmente quiero mencionar que el aprendizaje adquirido en el tema de liderazgo gerencial es tan práctico y funcional que se puede aplicar en cualquier faceta de nuestra vida, creyendo fielmente en que el liderazgo es la capacidad de motivar, servir, y transformar personas, y que un verdadero líder hace que las cosas sucedan.
Saludos,
